El submarino ARA San Juan (S-42) de la Armada Argentina es, junto al ARA Santa Cruz (S-41), uno de los dos únicos submarinos clase TR-1700 del mundo.
Construido en el astillero Thyssen Nordseewerke de la ciudad de Endem, Alemania, fue botado el 20 de junio de 1983 y entregado a la Armada Argentina el 18 de noviembre de 1985. En la que sería su primera prueba de navegación de largo alcance, zarpa de Alemania el 21 de diciembre de 1985 navegando en inmersión 27 días hacia la Base Naval Mar del Plata, donde arriba finalmente el 18 de enero de 1986.
Un año antes su gemelo, el submarino S-41 ARA Santa Cruz, había realizado la travesía en inmersión y superficie más larga que se conoce para un submarino convencional, viajando sin escalas entre su puerto de origen en Alemania y su base definitiva en Mar del Plata, Argentina. Fueron más 5200 millas en inmersión a velocidades superiores a los 10 nudos, consumiendo 260000 litros de combustible y quedando una reserva a bordo más que suficiente como para regresar a Europa a velocidad de crucero.
El ARA San Juan es un submarino oceánico, es decir que, gracias a su gran desplazamiento (2336 toneladas sumergido) que permite almacenar gran cantidad de combustible y provisiones además de otorgar mayor comodidad a la tripulación, puede operar en el océano abierto durante largos períodos. La autonomía de la clase TR-1700 es tal que permitiría dar la vuelta al mundo en la latitud de Mar del Plata en inmersión y sin reabastecer.
La arquitectura interna de los TR-1700, principalmente la de la sección de proa, ha servido de base para el diseño de los más recientes diseños alemanes tales como los submarinos Clase Dolphin (en servicio con la Armada de Israel), Clase 212 y 214. Entre otras características cabe destacar que, gracias a sus dos cubiertas, el Cuarto de Comando no es perturbado por el tránsito de la tripulación y se dispone de mayor comodidad para los tripulantes.
La propulsión es del tipo convencional diesel-eléctrica y consiste en cuatro motores diesel MTU de 16 cilindros en V y 1200 Kw de potencia conectados a cuatro generadores eléctricos de 4000 A que a su vez cargan a 960 elementos de baterías de plomo ácido que proporcionan energía eléctrica al motor eléctrico de propulsión (MEP) que, en su momento, fue posiblemente el motor eléctrico de corriente continua más grande del mundo.
Como todos los submarinos modernos, los TR-1700 están provistos de snorkel, mástil izable que permite tomar aire de la superficie para operar los motores diesel aún estando en inmersión. Estando sumergido puede alcanzar y sostener una velocidad de hasta 25 nudos, mientras que operando con snorkel alcanza la notable velocidad de 15 nudos. Gracias a su inmenso banco de baterías los submarinos clase TR-1700 pueden mantener su velocidad máxima en inmersión por períodos más prolongados que, por ejemplo, los submarinos clase 209.
El armamento del ARA San Juan consiste en hasta 24 torpedos SST-4 modificados lanzables desde sus seis tubos lanzatorpedos así como minas que pueden ser lanzadas desde cuatro de sus tubos. La dotación normal del buque es de 8 oficiales y 29 suboficiales pero puede también transportar fuerzas especiales alojadas en la espaciosa sala de torpedos a proa.
Desde su incorporación al Comando de la Fuerza de Submarinos (COFS) el ARA San Juan participó en las diversas Etapa de Mar que desarrolla la Armada Argentina con fines de adiestramiento así como en numerosas operaciones internacionales, tales como Unitas, Gringo-Gaucho, Atlasur, Passex, Gosth, y Fraterno. Entre los despliegues al exterior de mayor alcance se destacan el ejercicio Unitas XXXIII de 1992 en el que el ARA San Juan operó desde la Base Naval de la US Navy “Roosevelt Roads” en Puerto Rico; el "George Washington-FLEETEX” durante el cual el submarino operó en el Atlántico Norte y el "Operativo PASSEX 24-94" en el que ejercitó con unidades de la Armada de Venezuela, en el Caribe.
Las prestaciones excepcionales del modelo TR-1700, tales como su capacidad de inmersión a grandes profundidades, su baja tasa de indiscreción (TIS) y su versatilidad táctica, se encuadran con las demandas técnicas y tácticas que la Armada se impuso obtener para su Componente Submarinos a fines de los años 70 y que aún hoy en día siguen siendo únicas en el contexto regional. Estos verdaderos submarinos oceánicos, capaces de despliegues de largo aliento, son una herramienta fundamental para el control y custodia de los intereses de la República Argentina en el mar.
Construido en el astillero Thyssen Nordseewerke de la ciudad de Endem, Alemania, fue botado el 20 de junio de 1983 y entregado a la Armada Argentina el 18 de noviembre de 1985. En la que sería su primera prueba de navegación de largo alcance, zarpa de Alemania el 21 de diciembre de 1985 navegando en inmersión 27 días hacia la Base Naval Mar del Plata, donde arriba finalmente el 18 de enero de 1986.
Un año antes su gemelo, el submarino S-41 ARA Santa Cruz, había realizado la travesía en inmersión y superficie más larga que se conoce para un submarino convencional, viajando sin escalas entre su puerto de origen en Alemania y su base definitiva en Mar del Plata, Argentina. Fueron más 5200 millas en inmersión a velocidades superiores a los 10 nudos, consumiendo 260000 litros de combustible y quedando una reserva a bordo más que suficiente como para regresar a Europa a velocidad de crucero.
El ARA San Juan es un submarino oceánico, es decir que, gracias a su gran desplazamiento (2336 toneladas sumergido) que permite almacenar gran cantidad de combustible y provisiones además de otorgar mayor comodidad a la tripulación, puede operar en el océano abierto durante largos períodos. La autonomía de la clase TR-1700 es tal que permitiría dar la vuelta al mundo en la latitud de Mar del Plata en inmersión y sin reabastecer.
La arquitectura interna de los TR-1700, principalmente la de la sección de proa, ha servido de base para el diseño de los más recientes diseños alemanes tales como los submarinos Clase Dolphin (en servicio con la Armada de Israel), Clase 212 y 214. Entre otras características cabe destacar que, gracias a sus dos cubiertas, el Cuarto de Comando no es perturbado por el tránsito de la tripulación y se dispone de mayor comodidad para los tripulantes.
La propulsión es del tipo convencional diesel-eléctrica y consiste en cuatro motores diesel MTU de 16 cilindros en V y 1200 Kw de potencia conectados a cuatro generadores eléctricos de 4000 A que a su vez cargan a 960 elementos de baterías de plomo ácido que proporcionan energía eléctrica al motor eléctrico de propulsión (MEP) que, en su momento, fue posiblemente el motor eléctrico de corriente continua más grande del mundo.
Como todos los submarinos modernos, los TR-1700 están provistos de snorkel, mástil izable que permite tomar aire de la superficie para operar los motores diesel aún estando en inmersión. Estando sumergido puede alcanzar y sostener una velocidad de hasta 25 nudos, mientras que operando con snorkel alcanza la notable velocidad de 15 nudos. Gracias a su inmenso banco de baterías los submarinos clase TR-1700 pueden mantener su velocidad máxima en inmersión por períodos más prolongados que, por ejemplo, los submarinos clase 209.
El armamento del ARA San Juan consiste en hasta 24 torpedos SST-4 modificados lanzables desde sus seis tubos lanzatorpedos así como minas que pueden ser lanzadas desde cuatro de sus tubos. La dotación normal del buque es de 8 oficiales y 29 suboficiales pero puede también transportar fuerzas especiales alojadas en la espaciosa sala de torpedos a proa.
Desde su incorporación al Comando de la Fuerza de Submarinos (COFS) el ARA San Juan participó en las diversas Etapa de Mar que desarrolla la Armada Argentina con fines de adiestramiento así como en numerosas operaciones internacionales, tales como Unitas, Gringo-Gaucho, Atlasur, Passex, Gosth, y Fraterno. Entre los despliegues al exterior de mayor alcance se destacan el ejercicio Unitas XXXIII de 1992 en el que el ARA San Juan operó desde la Base Naval de la US Navy “Roosevelt Roads” en Puerto Rico; el "George Washington-FLEETEX” durante el cual el submarino operó en el Atlántico Norte y el "Operativo PASSEX 24-94" en el que ejercitó con unidades de la Armada de Venezuela, en el Caribe.
Las prestaciones excepcionales del modelo TR-1700, tales como su capacidad de inmersión a grandes profundidades, su baja tasa de indiscreción (TIS) y su versatilidad táctica, se encuadran con las demandas técnicas y tácticas que la Armada se impuso obtener para su Componente Submarinos a fines de los años 70 y que aún hoy en día siguen siendo únicas en el contexto regional. Estos verdaderos submarinos oceánicos, capaces de despliegues de largo aliento, son una herramienta fundamental para el control y custodia de los intereses de la República Argentina en el mar.
Ea86 de Taringa
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