Una nueva película de submarinos en TV3 tras Das Boot de hace dos semanas!!. Paree que estamos en racha.
La caza del Octubre Rojo es una película de 1990, basada en un best seller del mismo nombre y protagonizada por el personaje de ficción Jack Ryan creado por el novelista Tom Clancy. Fue la primera adaptación cinematográfica del Dr. Jack Ryan, interpretado por Alec Baldwin, cuyo papel protagonista se ve eclipsado por la interpretación por parte de Sean Connery como Ramius.
Este Best Seller estuvo inspirada por dos incidentes reales. En 1961, El capitán de la Armada Soviética, Jonas Pleškys, un lituano, navegó su submarino de Klaipėda a Gotland, Suecia, y no a su destino planeado, Tallin. Las autoridades soviéticas lo sentenciaron, en su ausencia, a morir fusilado, pero la CIA lo escondió, primero en Guatemala y más tarde en los Estados Unidos. El otro incidente ocurrió el 8 de noviembre de 1975, cuando la fragata soviética Storozhevoy se motinó. En ese entonces, los líderes de Occidente creyeron que era un intento de desertar de Letonia a la isla de Gotland. El motín fue liderado por el Oficial Político de la nave, Capitán Valery Sablin. El motín fracasó, y Sablin fue caputurado, juzgado en corte marcial y ejecutado.
Marko Ramius es el capitán del submarino nuclear más moderno de la Unión Soviética, el Octubre Rojo de la clase Typhoon, equipado con un revolucionario sistema silencioso de propulsión magnetohidrodinámica, el cual lo hace invisible a cualquier sonar. Al principio de la película, es mostrado en alta mar con otras unidades de la flota rusa, aparentemente para realizar su primer ejercicio. El capitán Ramius tiene otro plan: navegar con el submarino hasta la costa americana y desertar.
Para conseguir esto, debe asesinar al comisario político para quedarse a solas con sus oficiales, escogidos por él mismo, y llevar a cabo la deserción. Después de esto lee las nuevas órdenes a su tripulación, que consisten en atacar a los Estados Unidos, para respaldar la nueva ruta, y empezar su largo viaje. En un principio es descubierto y seguido por el submarino de combate estadounidense USS Dallas, pero con la activación del nuevo sistema de propulsión, aparentemente logran eludir su seguimiento y así poder seguir.
Mientras tanto, las autoridades soviéticas reciben una carta enviada por Ramius antes de su partida, anunciando su intención de desertar. El mando de la marina soviética se pone en alerta e inmediatamente manda a la mayor parte de su flota a la caza del Octubre Rojo. El despliegue de la flota soviética provoca un gran revuelo en Washington, ya que las intenciones rusas están poco claras, y desencadena un despliegue recíproco de la flota norteamericana.
En este momento, un analista de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) llamado Jack Ryan, que había estado investigando el submarino como un proyecto, sugiere la posibilidad de que Ramius pudiera estar desertando con el Octubre Rojo. El asesor en seguridad nacional del presidente, Jeffrey Pelt, sugiere que Ryan vaya con la flota del Atlántico Norte y establezca contacto con el submarino de algún modo antes de que los estadounidenses se vean forzados a hundirlo por ser una amenaza. En varios momentos de la película, Pelt sale conversando con el embajador soviético, que pide la ayuda estadounidense primero para localizar el Octubre Rojo, y luego para destruirlo. Falsamente afirma que la carta de Ramius declara su intención de atacar los Estados Unidos bajo su propia autoridad.
Al pasar por una ruta submarina, el Octubre Rojo es víctima de un sabotaje y tienen que parar el sistema de propulsión silencioso, que desemboca en un ataque con torpedos de la aviación naval rusa, donde Ramius demuestra su pericia como capitán. Al salir intactos del ataque y reparar el sistema de propulsión, el submarino "USS Dallas", gracias a los esfuerzos de un operador de sonar, Ronald "Jonesey" Jones, lo localiza otra vez. La llegada de Ryan les fuerza a perder el contacto con el submarino, cuyos oficiales han deducido que han encontrado la forma característica con la que se muestra el nuevo motor de propulsión en el sonar y así poder ubicarlo.... para saber como acaba debereis mirarla.
Una película sublime con mucha tensión y un Sean Connery soberbio. Todo un lujo para los amantes de submarinos y una de las mejores películas que se han hecho sobre ellos.
Nacho Padró
11 octubre 2008
10 octubre 2008
Paul Langevin y el Sonar
El joven francés Paul Langevin (1872-1946) era uno de esos muchachos que siempre son el primero de la clase... nunca el segundo (lo que da cierta rabia) incluso mientras estudiava ciencia en la Universidad de Cambridge.
En 1912 , el gigantesco trasatlántico Titanic se hundió en las frias aguas de Terranova llevándose miles de vidas junto a él. Tras la catástrofe, a Langevin le apasionó la idea de usar ondas sonoras para encontrar objetos hundidos. Afirmó que las Ondas Sonoras podrian haber detectado el fatídico iceberg con el que chocó el Titanic.
Así que el 1915 puso en marcha su idea con un invento que posteriormente se conoció como SONAR (SOund NAvigation and Ranging). Básicamente consistía en un elemento llamado Transductor que produce un sonido muy agudo o PING que chocaba con los cuerpos sumergidos ya sean barcos hundidos, peces, ballenas o submarinos. Los ecos que produce el choque son recogidos al regresar las ondas por el transductor y convertidos en impulsos eléctricos.
Un receptor mide la intensidad de los ecos y el tiempo que tardan en volver. Cuanto más sólido sea el objeto más fuerte es el eco y cuanto más tarda, más lejos se encuentra del transductor.
De esta manera puedes ver la posición y movimientos de los objetos que se encuentran bajo el agua.
Fue durante la II Guerra Mundial que el sonar tuvo un fuerte impulso, ante la amenaza de las Manadas de Lobos alemanas y cuya entrada en funcionamiento provocó el inicio de su declive.
Basado en "Esa Horrible Ciencia: Esos Insoportables Sonidos" de Nick Arnold
Nacho Padró
En 1912 , el gigantesco trasatlántico Titanic se hundió en las frias aguas de Terranova llevándose miles de vidas junto a él. Tras la catástrofe, a Langevin le apasionó la idea de usar ondas sonoras para encontrar objetos hundidos. Afirmó que las Ondas Sonoras podrian haber detectado el fatídico iceberg con el que chocó el Titanic.
Así que el 1915 puso en marcha su idea con un invento que posteriormente se conoció como SONAR (SOund NAvigation and Ranging). Básicamente consistía en un elemento llamado Transductor que produce un sonido muy agudo o PING que chocaba con los cuerpos sumergidos ya sean barcos hundidos, peces, ballenas o submarinos. Los ecos que produce el choque son recogidos al regresar las ondas por el transductor y convertidos en impulsos eléctricos.
Un receptor mide la intensidad de los ecos y el tiempo que tardan en volver. Cuanto más sólido sea el objeto más fuerte es el eco y cuanto más tarda, más lejos se encuentra del transductor.
De esta manera puedes ver la posición y movimientos de los objetos que se encuentran bajo el agua.
Fue durante la II Guerra Mundial que el sonar tuvo un fuerte impulso, ante la amenaza de las Manadas de Lobos alemanas y cuya entrada en funcionamiento provocó el inicio de su declive.
Basado en "Esa Horrible Ciencia: Esos Insoportables Sonidos" de Nick Arnold
Nacho Padró
Suscribirse a:
Entradas (Atom)