El gobierno tailandés aprobó la compra de un nuevo submarino a China por un total de 380 millones de dólares, según hicieron público el pasado miércoles funcionarios tailandeses del Ministerio de Defensa de este país asiático.
El año pasado, el gobierno tailandés, pese a que se había hablado mucho del tema, no aprobó finalmente la compra del sumergible de origen chino. Con la aprobación por parte del gabinete, Tailandia inicia un programa destinado a dotarse de hasta tres unidades del modelo chino S26T. El programa tendrá un presupuesto aproximado ligeramente superior a los 1.000 millones de dólares.
El modelo elegido, el S26T tiene un desplazamiento en inmersión de 2.600 toneladas y está equipado con un sistema de propulsión independiente de aire -sin especificar el tipo de AIP que monta- unido a un sistema convencional diesel-eléctrico. Se basa en el SSK Tipo 039A en servicio en la Armada de la República Popular de China (PLAN), también denominado clase Yuan, un modelo bastante reciente, toda vez que fue encargado por primera vez en 2008. No obstante, los submarinos tailandeses serán notablemente más pequeños, pues el modelo chino cuenta con un desplazamiento de 3.600 toneladas y una longitud de 75 metros.
El almirante Jumpol Loompikanon, portavoz de la Royal Thai Navy, dijo que: “este submarino permitiría a la Armada de Tailandia estudiar nuevas tácticas navales, así como la mejor forma de proteger a Tailandia de potenciales amenazas submarinas.”
Esto supone un paso más en el viraje de Tailandia hacia China, pues si tradicionalmente había sido un operador de equipos occidentales -incluído el portaaviones de construcción española HTMS Chakri Naruebet-, en los últimos años y de forma creciente, ha ido adquiriendo equipos de procedencia china como las fragatas Type 025T o 053HT o las corbetas Hua Hin o Pattani.
Se desconoce por el momento las transferencias tecnológicas que lleva asociadas el nuevo programa, aunque se estima que serán sistanciales toda vez que Tailandia suele adquirir licencias de fabricación para construir los buques en sus propios astilleros.
Además, en los últimos años tripulaciones tailandesas han estado entrenando en Alemania y Coreal del Sur y recientemente, en julio de 2014 abrieron en el puerto de Sattahip un centro de entrenamiento que servirá también de cuartel general para la flota submarina cuando comiencen las operaciones con el primero de los nuevos submarinos que se espera entre en servicio en 2023.
No hay comentarios:
Publicar un comentario