20 octubre 2012

La Armada ensaya el rescate de submarinos siniestrados.

Efectivos de la Armada han desarrollado hoy en Cartagena ejercicios de adiestramiento avanzados relacionados con el salvamento y rescate de los tripulantes de un submarino siniestrado.
Estos ejercicios, denominados "Cartago", se desarrollan anualmente en la base de la Armada de Cartagena, donde se ha colocado el submarino "Galerna" a una profundidad de 12 metros para simular que está accidentado y su tripulación atrapada en su interior.
Según ha informado el teniente de marina Fernando Aguirre Pastor, la primera fase de los ejercicios, que se desarrolló a comienzos de esta semana, consistió en la correcta localización del submarino a través de avisos a las estaciones de Salvamento Marítimo, como si de un caso real de hundimiento se tratara.
En esos casos, el Estado pide la colaboración de otros países e instituciones para obtener medios de rescate, que tardan una media de 72 horas en llegar al lugar del siniestro. Durante ese periodo, el cometido de la Armada es aprovisionar de alimentos y otros bienes a la tripulación del submarino hundido y realizar operaciones de ventilación y renovación del aire.
Cuando las condiciones en el interior del submarino no son aptas para la vida o los medios internacionales de rescate no pueden llegar a tiempo, la dotación debe salir a la superficie a través de técnicas de "escape libre", que es la práctica que hoy se ha llevado a cabo con seis efectivos de la Armada.
El escape se hace a través de una exclusa de salvamento con un traje especial cuya eficacia se ha probado en rescates de hasta cien metros de profundidad, si bien el escape es más peligroso cuanto más profundo se encuentre el submarino siniestrado debido a los fuertes cambios de presión, ha explicado Aguirre.
En este tipo de rescates la Armada actúa conjuntamente con las fuerzas de salvamento civil, y la coordinación es "vital", ya que los escapados necesitan atención médica inmediata, y el proceso de escape puede prolongarse durante horas, ya que cada miembro de la dotación (un submarino puede transportar hasta 60 personas) tarda entre 15 y 30 minutos en salir a la superficie por este sistema.
La parte final del ejercicio consiste en sacar de nuevo a flote el submarino, una operación en la que participa el buque de salvamento "Neptuno".
Aguirre ha subrayado la importancia de este tipo de ejercicios de adiestramiento para potenciar la capacidad de la Armada de actuar en caso de accidentes, si bien ha recordado que "es muy difícil que un submarino se hunda", y ha apuntado que la Armada española no ha perdido ningún submarino desde los años 60 y que los incidentes puntuales no suelen hacer temer por la vida de la nave.

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