30 diciembre 2020

Guerra submarina italiana, la réplica

 Tres fueron las batallas escogidas para demostrar que la Guerra Submarina italiana no era tan ineficiente como el almirante Mario Falangola -su propio comandante- decía.

Bueno, él y el resto de los interesados en la Segunda Guerra Mundial…

Si bien los 150 barcos hundidos por los sommergibili ya dicen mucho, el estudio detallado de las tres acciones nos indica que las tripulaciones de los submarinos y los buques antisubmarinos de la Regia Marina ponían mucho empeño, supliendo con arrojo y maña el retraso científico con el que Italia entró en el conflicto. Aunque -si bien tarde y tal y como se indica en el programa- la tecnología y tácticas antisubmarinas italianas lograron ponerse a la par de la de sus enemigos.

Los ejemplos escogidos fueron una cacería antisubmarina, una lucha entre dos submarinos y un combate aero-naval-submarino. Si queréis conocer estas intensas y dinámicas batallas os invitamos a escuchar el episodio haciendo clic EN ESTE ENLACE. Y si ya lo habéis oído y estáis aquí para ver a los protagonistas, helos aquí:

Nuestra cacería submarina fue una lucha entre un David de los mares, el pequeño exdestructor Achille Papa, y un vedadero Goliat subacuático, el submarino HMS Cachalot. Lo de exdestructor está explicado en el episodio.

La especializada cacería aeronaval que  cuatro barcos italianos y dos bombarderos Junkers Ju-88 hicieron del mortífero submarino británico HMS Sahib, destructor de once barcos, no tuvo nada que envidiar a ninguna nación participante de la Segunda Guerra Mundial. Las responsables de este salto tecnológico fueron las corbetas de la clase Gabbiano, diseñadas y construidas a guerra iniciada. En nuestro episodio encontraréis detalles de sus avanzados sistemas y tácticas. 

El tercer encuentro narrado en nuestro episodio Guerra submarina italiana, la réplica fue un duelo más parecido a una justa medieval que a una batalla naval. En él no participó barco alguno sino que enfrentó a dos sumarinos, el HMS Triad contra el sommergibile Enrico Toti. Debemos deciros que en la lucha no faltó de nada: maniobras, contramaniobras, cortinas de humo, balazos, cañonazos y torpedazos. Un combate alucinante. A continuación los contendientes:


Programa Snakehead

 



Drone con un probable portador en forma de submarino "Ohio"

La Marina de los EE. UU. Continúa implementando un proyecto a gran escala para crear un submarino no tripulado flota... Uno de los programas que se están implementando hasta la fecha es el programa Snakehead. 

Estamos hablando de la creación de un vehículo robótico submarino no tripulado de gran desplazamiento. Cuando se cree, se espera que Snakehead sea el dron submarino más grande de la Marina de los EE. UU.

Ciertas clases de submarinos nucleares estadounidenses serán los portadores de los drones submarinos Snake Head. La principal tarea establecida por el Pentágono al ordenar este tipo de desarrollo es de varias etapas. El caso es que Snakehead (según los términos de referencia) podrá participar en operaciones de recolección de datos, utilizados como medio submarino de guerra electrónica (guerra electrónica).

También se dice que Snakehead se utilizará para desembarcar marines en una determinada costa, así como para llevar nadadores de combate a una u otra parte del área de agua. En este caso, el vehículo submarino estadounidense tiene todas las características de un dron de sabotaje.

El 23 de diciembre, Estados Unidos emitió los términos de referencia finales para la creación de una gran plataforma submarina no tripulada LDUUV. Este es el muy mencionado Snakehead. Ahora la Armada de los Estados Unidos debe elegir la opción más adecuada, desde su punto de vista.

De un comunicado de prensa de la Marina de los EE. UU.:

El Snakehead es un dron subacuático altamente duradero, multipropósito y de alto desplazamiento en desarrollo, que se puede implementar desde grandes interfaces submarinas abiertas, con capacidad de carga útil reconfigurable.

Se prevé que los primeros dispositivos de este tipo se utilicen "exclusivamente en misiones de reconocimiento", sin embargo, con el tiempo, como ya se ha señalado, se prevé que la "Cabeza de serpiente" se utilice para la guerra electrónica y el aterrizaje. 

Cabe destacar otro propósito del dron submarino estadounidense robótico desarrollado. Se indica en documentos oficiales como "trabajos con cables submarinos y otro tipo de infraestructura". En este sentido, no se puede descartar la opción de utilizar Snakehead para sabotaje contra los objetos mencionados, dado el potencial de entrega de nadadores de combate al sitio.

28 diciembre 2020

Lanzamiento del proyecto 971 del submarino nuclear mejorado "Leopard" en Severodvinsk

 Lanzamiento del proyecto 971 del submarino nuclear mejorado "Leopard" en Severodvinsk


El submarino nuclear mejorado "Leopard" del proyecto 971 se lanzó en Severodvinsk, se completó la etapa de grada de la reparación del submarino. Así lo informó el servicio de prensa del Ministerio de Defensa con referencia a una declaración del Comandante en Jefe de la Armada Nikolai Evmenov. 

Según el informe, el 25 de diciembre de 2020, el submarino nuclear Leopard fue retirado del cobertizo para botes del centro de reparación de barcos Zvezdochka en Severodvinsk para realizar más trabajos en el muelle de la empresa. 

El submarino nuclear "Leopard" se convirtió en el primer barco de la tercera generación, cuya reparación media y profunda modernización se lleva a cabo en el astillero del centro de reparación de buques Severodvinsk "Zvezdochka" como parte del programa para mantener el nivel requerido de preparación para el combate del grupo de submarinos nucleares multipropósito de la Naval. Flota

- cita el Ministerio de Defensa de las palabras del comandante en jefe de la Armada. 

Por el momento, el submarino ha llevado a cabo la sustitución de armas electrónicas, sistemas de control, comunicaciones, navegación, hidroacústica y BIUS. El submarino recibió nuevas armas (KR "Calibre"), y la firma acústica también se redujo. Aún no se ha anunciado el momento del regreso a la flota. 

El submarino nuclear multipropósito K-328 "Leopard" de la Flota del Norte fue depositado en Sevmash el 26 de octubre de 1988, botado el 28 de junio de 1992 y entró en la flota el 5 de febrero de 1993. Llegué a Zvezdochka a finales de junio de 2011. En mayo de 2012, se colocó el barco en un cobertizo para botes y se inició el desmantelamiento del equipo. En 2014, se informó sobre los planes para completar el trabajo en el submarino en 2015, pero el trabajo inicialmente se retrasó debido a un retraso en la documentación del diseñador del SPMBM "Malachite".

Es parte de la 24ª "División Animal" de la Flota del Norte de la Armada. Además del Leopard, la división también incluye los submarinos Tiger, Vepr, Panther, Wolf y Gepard.

Greyhound: Enemigos bajo el mar, una película entretenida pero falta de enjundia

 POR @WICHO — 25 DE DICIEMBRE DE 2020

A principios de 1942 el comandante Ernest Krause, un veterano de la Armada de los Estados Unidos, recibe su primer mando. Como capitán del destructor USS Keeling, que usa Greyhound como indicativo de radio, es el máximo responsable de la protección del convoy HX-25 que tiene que cruzar el Atlántico desde los Estados Unidos con destino a Liverpool. Son 37 cargueros y transportes de personal a los que dan escolta cuatro barcos de guerra.

Greyhound se centra en las 50 horas que pasan el el «agujero negro», la zona del Atlántico que queda fuera del alcance tanto de aviones basados en los Estados Unidos como de aviones basados en el Reino Unido. La zona del Atlántico preferida por las manadas de lobos de submarinos alemanes para llevar a cabo sus ataques ya que es dónde los convoyes tienen menos protección. En el caso del HX-25 una manada de seis submarinos los acosará sin cesar durante esas 50 horas.

Está basada en la novela The Good Shepherd que a su vez se basa en los hechos reales –y claves– de la Batalla del Atlántico durante la Segunda Guerra Mundial. Pero aunque el convoy HX-25 existió su composición fue distinta a la mostrada en la película. Y Krause no estaba al mando; de hecho Krause es un personaje inventado aunque basado en las personas reales que estuvieron al mando de las escoltas de los convoyes aliados en el Atlántico.

Siguiendo las maniobras de los submarinos
Siguiendo las maniobras de los submarinos – 

Está claro que Krause y su tripulación son los protagonistas. Pero por eso mismo creo que la pelícuña se queda corta a la hora de transmitir la importancia de los convoyes y de la Batalla del Atlántico. Y muy, muy, corta a la hora de transmitir la angustia que tenía que ser ir en uno de ellos. De hecho en la película quienes van a bordo de los cargueros y transportes de personal sólo existen a través del telégrafo de señales o como mucho como algunos náufragos que recoger del mar. Y sin duda eran los que lo pasaban peor pues al menos las tripulaciones de los escoltas tenían un papel activo a la hora de enfrentarse a los ataques de los submarinos en vez de tener que esperar sentados a ver si sobrevivían a la noche. Y no sé si alguien que no tenga un poco de idea de cómo los buques de escolta luchaban contra los submarinos no se perderá un poco.

En cualquier caso me ha parecido entretenida y adecuada para pasar un rato, aunque diría que no es, ni con mucho, una gran película.

26 diciembre 2020

El destino del Anchar: por qué Rusia desechó al submarino más rápido en la historia

 Con sus características únicas el sumergible nuclear soviético del proyecto 661 Anchar estableció el récord mundial de velocidad en 1970, al alcanzar 45 nudos bajo el agua (83 km/h). Aun así, la nave nunca se produjo en serie y solo se fabricó una unidad. Conoce por qué los submarinos de alta velocidad resultaron inútiles para la Armada rusa.

Para realizar la maniobra a una profundidad de 100 metros, la tripulación desactivó el sistema de protección de las turbinas para que la nave funcionase en el tope de sus límites. 

Cuando sus reactores nucleares alcanzaron la potencia del 97%, el Anchar voló bajo el agua a una velocidad de 44,7 nudos (más de 82 kilómetros por hora), mientras que su límite establecido en la construcción era de 38 nudos, escribe el columnista de la versión rusa de Sputnik Nikolai Protopopov.

Incluso 50 años después, ningún submarino en el mundo es capaz de moverse a tal velocidad. El límite para los aparatos modernos es de 35 nudos. Sin embargo, la gran velocidad del Anchar tenía muchas desventajas. A los 35 nudos el ruido en la sección central llegaba a los insoportables 100 decibeles. 

Mientras que el flujo de agua al chocar con los bordes producía un rugido similar al de un avión. Entonces, el submarino perdía su principal ventaja: el efecto sorpresa. Las sobrecargas en altas velocidades aplastaban el metal de la carcasa mientras que las escotillas de entre secciones salían volando por la presión.

Con todo esto, el Anchar recibió el visto bueno de la junta directiva de la Marina, afirma Protopopov. A pesar de las desventajas, encajaba perfectamente con su objetivo: cazar portaaviones. Gracias a su capacidad de movimiento rápido, el submarino podía tomar una posición adecuada instantáneamente para disparar los misiles de crucero y escapaba con facilidad de los torpedos enemigos. 

Las tecnologías del futuro

El proyecto 661 fue iniciado a finales de los 50. Los ingenieros involucrados en él recibieron importantes instrucciones: no contar con la técnica, equipos y electrónica ya existentes, sino construir algo completamente nuevo.

Para la fabricación del cuerpo del nuevo sumergible se eligió el titanio —por encima de aluminio y el acero— debido a sus ventajas para las condiciones de aguas profundas: es antimagnético, ligero y resistente a la oxidación. 

"De hecho, habría resultado un submarino eterno. De no ser por el accidente con la bomba de circulación, se habría mantenido en servicio hasta ahora. Pero la primera aleación no tuvo éxito debido a la falta de experiencia. Se han formado grietas en la carcasa. Por lo tanto, fue limitada la profundidad de inmersión", cuenta a Sputnik el diseñador jefe de submarinos nucleares Radiy Shmakov.

Al final, el Anchar obtuvo una carcasa ligera cilíndrica con dos hélices ubicados a cinco metros entre sí. El sumergible de la longitud de 107 metros tenía nueve secciones separadas herméticas y su tripulación constaba de 80 personas.

En el submarino fue instalado el equipo más moderno de aquel entonces: muchos de esos sistemas fueron probados en el mar abierto por primera vez, en particular, los complejos de telecomunicaciones y fibra óptica. Justo con esto tenían un gran recurso del funcionamiento autónomo: el sumergible pudo permanecer en el mar durante 70 días sin entrar en el puerto.

En lo que se refiere a las armas, en la parte frontal colocaron cuatro tubos lanzatorpedos de 533 milímetros y cinco contenedores con los misiles antibuque Ametist. Los misiles se lanzaban desde una profundidad de 30 metros y alcanzaban blancos a una distancia de hasta 70 kilómetros. Anchar era capaz de realizar un golpe masivo con dos voleas a intervalos de tres minutos.

Problemas y pruebas

Debido a la gran dificultad del proyecto y la falta de experiencia, la construcción del Anchar duró alrededor de una década. Se presentaron problemas con el suministro de titanio y otros componentes, la complejidad de la instalación de sistemas a bordo y numerosos retrasos asociados con la adopción de un nuevo sistema de misiles.

Por esto el submarino entró en servicio de la Flota del Norte en enero de 1970. En los planes estaba construir diez naves de este tipo, pero se limitaron a solo una ya que resultó más cara de lo que se esperaba. Según las estimaciones, su valor superó los 2.000 millones de rublos soviéticos. Por ejemplo, un auto en 1970 se podía comprar por 3.500 rublos.

Además, sus pruebas revelaron defectos en el sistema de misiles, numerosas fallas en el equipo, poca confiabilidad de los ensamblajes y dificultades con el mantenimiento. Se consideró inapropiado modernizar el aparato.

"El relleno del sumergible estaba hecho de diferentes metales y aleaciones, y a menudo había un par de titanio-metal. Cuando entraba en contacto con el agua de mar, se iniciaba una reacción química. Los tornillos, tuercas y todo lo que sujetaba al casco de titanio desde el interior se corroía", señala el contralmirante Valeri Filátov, quien estuvo al mando de Anchar de 1985 a 1987.

A pesar de que la mayoría del tiempo de servicio el Anchar lo pasaba en los hangares, una vez logró demostrar sus habilidades en una misión real. En 1971 detectó al portaaviones estadounidense USS Saratoga y lo persiguió desde el Mar de Groenlandia hasta la Fosa de Brasil. Los estadounidenses hicieron todo lo posible por escapar del submarino desconocido, que jugaba con ellos "como un gato y un ratón", escribe el columnista Protopopov.

Durante el último patrullaje se dañó la bomba centrífuga en uno de los reactores y la tripulación tuvo que regresar a la base, recuerda su capitán Filátov. Nunca ha salido de allí: tras permanecer 25 años en el muelle, en 2010 fue desmantelado.

Muerte y salvación. Programa de seguridad submarina SUBSAFE (EE. UU.)

 Muerte y salvación. Programa de seguridad submarina SUBSAFE (EE. UU.)

Submarino USS Thresher en la grada, 9 de julio de 1960

El 10 de abril de 1963, el submarino nuclear estadounidense USS Thresher (SSN-593) murió durante las pruebas en el mar después de las reparaciones. Durante la investigación de las causas de esta catástrofe, se identificaron múltiples problemas de diversa índole, que de una forma u otra podrían contribuir a la muerte del buque. Como resultado, se propuso, desarrolló y adoptó el programa de seguridad submarina SUBSAFE para su implementación.

Por razones técnicas


El 17 de diciembre de 1917, el submarino USS F-1 (SS-20) chocó con el submarino USS F-3 y se hundió. Esta fue la primera pérdida de cualquier submarino estadounidense moderno, y lejos de la última. Hasta principios de los años sesenta, un total de 14 submarinos de diversas clases y tipos se hundieron en un entorno no combativo. Las causas más comunes de muerte de embarcaciones fueron colisiones con otras embarcaciones y defectos de diseño, incluidos defectos de fabricación.

El 10 de abril de 1963, el submarino nuclear USS Thresher, el barco líder del proyecto del mismo nombre, fue probado después de la reparación. En este día, la tarea de los buceadores fue bucear a la profundidad máxima de diseño. A una profundidad de más de 300 m, el barco intentó sin éxito atravesar los tanques de lastre, sin embargo, debido a un mal funcionamiento, la inmersión continuó. Después de eso, el submarino se hundió a 730 m, donde se destruyó un casco sólido.


"Thrasher" en el mar

La investigación adicional identificó las causas más probables del desastre. Durante la inmersión, un aumento de la presión del agua de mar provocó la destrucción de la junta soldada de una de las tuberías del tanque de lastre. A través de la grieta, el agua comenzó a fluir hacia los compartimentos de popa, inundando los equipos eléctricos. Un intento de soplar a través de los tanques de lastre y flotar hacia la superficie fracasó: debido a la alta humedad del aire, los mecanismos correspondientes se congelaron y no funcionaron. Los detalles del diseño de los compartimentos no permitieron a los submarinistas llegar a las unidades dañadas y salvar el barco.

Programa de seguridad


El almirante Hyman Rikover, "el padre del submarino nuclear flota USA ", señaló durante la investigación que la muerte de" Thrasher "no fue el resultado de una sola conexión defectuosa. Creía que las condiciones previas para el accidente eran enfoques incorrectos para el diseño, la construcción y el funcionamiento de los submarinos. En consecuencia, para excluir tales incidentes en el futuro, fue necesario tomar ciertas medidas.

Ya en junio de 1963, antes de que se completara la investigación, se desarrolló el Programa de Seguridad Submarina (SUBSAFE). En diciembre, fue aprobado y aceptado para su implementación. Después de eso, los especialistas de la Armada tuvieron que verificar los proyectos reales en busca de errores de ingeniería y tecnológicos o "puntos débiles".


El programa SUBSAFE tenía como objetivo maximizar la resistencia, la capacidad de supervivencia y la estabilidad de la estructura. Es curioso que las medidas del programa afectaron solo al casco sólido y los sistemas de los barcos, experimentando la presión del agua de mar. Las plantas de energía y los medios de propulsión, los sistemas de información y control y las armas se desarrollaron de acuerdo con los requisitos de otros programas y protocolos. Sin embargo, en un submarino nuclear típico hay muchos sistemas y ensamblajes, de una forma u otra, relacionados con cuestiones de resistencia y estanqueidad del casco.

El programa se divide en cuatro áreas. Los certificados de conformidad se emiten para proyectos en su conjunto y sus componentes individuales relacionados con la resistencia. También están certificados los materiales y montajes utilizados en la construcción. Los controles SUBSAFE se llevan a cabo durante la construcción del barco y durante las pruebas. Todos los documentos se conservan durante toda la vida útil del submarino, lo que simplifica la investigación de varios incidentes.

Después de la finalización de las pruebas en el mar, el submarino recibe un certificado final que le permite ser utilizado en la composición de combate de la Armada. Desde mediados de los años sesenta, todos los submarinos estadounidenses de nueva construcción cuentan con dicho documento. Los barcos más antiguos, construidos antes de la introducción del programa, continuaron en servicio, pero gradualmente dieron paso a otros nuevos.


Tubo deformado levantado del difunto USS Thresher

SUBSAFE también se refirió a los métodos de entrenamiento de buceo. Los marineros y oficiales en el curso de formación estudian exhaustivamente los accidentes pasados, incl. muerte del USS Thresher (SSN-593). Se les presenta los prerrequisitos técnicos y organizativos, el curso de los incidentes y las consecuencias. Además, los submarinistas pueden sacar conclusiones sobre el progreso de las últimas décadas y evaluar cómo los constructores navales han mejorado su seguridad.

Consecuencias del programa


En 1963-64. La Marina de los Estados Unidos lanzó el programa SUBSAFE. Los diseños de submarinos actuales se han sometido a controles adicionales para detectar errores técnicos o de otro tipo. Resultó que los proyectos de importancia estratégica tienen muchas deficiencias. Afortunadamente, fueron descubiertos y arreglados a tiempo.

Las inspecciones en astilleros y plantas de abastecimiento terminaron con resultados similares. No todos los materiales utilizados en la construcción de embarcaciones nuevas cumplían los requisitos. También se han producido técnicas de montaje incorrectas y violaciones de los procesos aprobados. Sin embargo, la detección oportuna de problemas permitió eliminarlos en el menor tiempo posible y prevenir accidentes en el futuro.


USS Scorpion, el último submarino nuclear de la Marina de los EE. UU. Muerto

La necesidad de controles adicionales en diferentes etapas provocó algunos retrasos en la construcción. Además, se suponía que todas las medidas de certificación propuestas aumentarían el tiempo de desarrollo y construcción de nuevos submarinos, y también podrían conducir a un aumento en el costo. Sin embargo, este se consideró un precio aceptable a pagar por la mayor confiabilidad y seguridad de los submarinistas.

A fines de los años sesenta, la Marina de los Estados Unidos pudo recopilar suficientes estadísticas y sacar conclusiones. En general, el programa SUBSAFE ha dado sus frutos. Aumentó significativamente la confiabilidad de los submarinos recién construidos y redujo el número de accidentes. Además, las averías a menudo no tuvieron consecuencias graves. El programa de seguridad fue reconocido como exitoso y aún se está implementando.

Sin embargo, la introducción de medidas SUBSAFE no descartó un accidente y una tragedia. Entonces, el 30 de junio de 1968, un submarino USS Scorpion (SSN-589) del tipo Skipjack se hundió en el Océano Atlántico. No fue posible establecer las razones exactas del incidente, se consideraron varias versiones. Al mismo tiempo, la muerte del Scorpion confirmó la necesidad de inspecciones y certificación: el proyecto Skipjack se completó antes de la introducción de un nuevo programa de seguridad.


Submarino USS San-Francisco en dique seco sobre. Guam, 27 de enero de 2005

Lengua de numeros


Hasta 1963, la Marina de los EE. UU. Perdió 14 submarinos por razones ajenas al combate, en su mayoría diseños iniciales. USS Thresher ocupó el puesto 15 en esta triste lista. El siguiente, y, para deleite de la flota, el último, fue el USS Scorpion. Desde 1968, las fuerzas de submarinos estadounidenses no han perdido una sola unidad de combate en accidentes.

Hubo muchas situaciones de emergencia y accidentes, incl. con las consecuencias más graves. Sin embargo, en todos los casos, las tripulaciones pudieron organizar el control de daños, tomar las medidas necesarias y regresar a la base para reparaciones.

En este contexto, el incidente del 8 de enero de 2005 es indicativo de que el submarino USS San Francisco (SSN-711) clase Los Ángeles, moviéndose a una profundidad de 160 m a una velocidad máxima, se estrelló contra un monte submarino. Se han producido daños graves en los conjuntos de arcos; 89 de 127 submarinistas recibieron varias heridas, uno murió más tarde. Sin embargo, la nave viajó más de 360 ​​millas aproximadamente. Guam. Allí, en el dique seco, se instaló un cono de nariz temporal en el submarino, con la ayuda de la cual pudo llegar al astillero en Brementon, pcs. Washington.


San Francisco con carenado temporal, 8 de mayo de 2005

Después de una renovación completa, el San Francisco volvió a funcionar. Posteriormente, el mando de la Armada señaló que sin las medidas previstas por el programa SUBSAFE, el submarino ni siquiera podría llegar a Guam. Así, las medidas propuestas allá por los años sesenta siguen salvando a los submarinistas.

Muerte y salvación


La Marina de los Estados Unidos se ha enfrentado al problema de los accidentes submarinos desde la fundación de las fuerzas submarinas. Como resultado de las investigaciones de estos incidentes, se tomaron varias medidas. En general, esto ayudó a prevenir posibles accidentes, pero no los excluyó por completo. Solo en 1963, después de la primera pérdida del submarino nuclear, se decidió elaborar e implementar un programa de control de calidad y seguridad a gran escala para los submarinos.

La creación e implementación de SUBSAFE no fue rápida ni fácil, y también generó un aumento de costos en varias etapas. Sin embargo, estas medidas se justificaron plenamente. El programa de seguridad submarina aún está en curso y sus resultados son bien conocidos. La Marina de los Estados Unidos no tiene ninguna razón para abandonarlo. Y los buceadores pueden estar tranquilos. En caso de accidente, podrán salvarse a sí mismos y al barco de la destrucción.
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Marina de los EE.UU