No basta con construir el submarino más avanzado, sino que también hay que saber cómo utilizarlo. Por eso, el capitán de corbeta e ingeniero del S-80, Juan Manuel Torrijos Colado, afirmó, durante la conferencia sobre construcción de sumergibles que pronunció el jueves en el centro cultural Cajamurcia, que «todos trabajamos, sobre todo la flotilla, para que no nos pase como a Portugal, que se quedó sin gente cualificada para manejar sus nuevos submarinos». El ingeniero militar destacó que «la flotilla, con el comandante José Sierra al mando, tiene que saber llevar esta transición para estar lista para la llegada del S-80».
Este capitán de corbeta ofrecerá otra conferencia mañana, a las 19.30 horas, en el mismo lugar, sobre rescate y salvamento marítimo. Estas ponencias se enmarcan en el centenario del Arma Submarina.
Sobre el problema portugués, exponen desde la Armada española que los lusos dejaron a un lado el adiestramiento de su tropa porque no tenían submarinos donde destinarlos y eso ocasionó que, una vez recibidos los nuevos sumergibles de origen alemán, faltarán efectivos para navegar con ellos. Los portugueses tuvieron que ir a Alemania a formarse en cómo manejar su nueva adquisición e, incluso, unos 40 militares vinieron a Cartagena en 2009 para hacer un curso sobre escape de submarino, certificación necesaria para ser tripulante de la nave de la marina lusa. Torrijos comentó que «un alto cargo luso murió por un infarto del estrés de vida que llevaba ante la falta de recursos humanos y tener que compaginar ser capitán de navío, profesor escuela naval y otras funciones».
«Navantia y la Armada somos los responsables de sacar adelante el S-80», así de contundente se mostraba el ingeniero militar del sumergible previsto para 2018. El capitán de corbeta reconoció errores en la construcción del S-80, pero también justificó que «fabricar submarinos es muy complicado, más aún cuando el equipo de ingenieros es inferior en número al de otras grandes potencias». Y, por eso, señaló que «estamos haciendo un esfuerzo y ahora es cuando estamos aprendiendo a fabricarlos».
Torrijos no se esconde y se muestra valiente a la hora de reconocer los fallos que han supuesto el incremento del presupuesto y de los plazos de entrega del nuevo arma submarina 100% española. «Nos faltaba disciplina, no llevábamos una gestión integral y no controlábamos los gastos», pero ahora «nos reunimos cada semana con Navantia y llevamos un control exhaustivo de cada uno de los miles de puntos e ítems del proyecto». Para este ingeniero militar del S-80, «es un suicido hacer un submarino con un sistema de propulsión y combate completamente nuevo». Algo que Torrijos también ve como un «reto» porque, según él, «al tener que integrar a empresas locales se convierte en un proyecto muy bueno para el desarrollo económico de España». Por eso, Torrijos pide apoyos y critica la «falta tremenda de confianza en el S-80».
ANTONIO GONZÁLEZ @AGBLAYA
http://www.laopiniondemurcia.es/cartagena/2015/03/08/pase-portugal-quedo-gente-nuevos/631190.html
Dejemos de vernos como idiotas, ni lo somos ni nos ven así fuera. ¿Saben quién vendió un portaaeronaves nuevo a otra armada aparte de a la propia?. ¿Y quien dos buques de proyección estratégica utilizables como portaaeronaves a otra armada y a la propia del país?. Pues sepan que ningún país ha vendido naves como estas nuevas a otra armada. ¿Sobrecostes de última hora?. Lean sobre el dron alemán.
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