El nieto del explorador Jacques Cousteau está construyendo una red de estaciones de investigación de los fondos marinos que se asemeja a una "estación espacial submarina".
Prevista para 2025, la primera estación del proyecto, denominada Proteus, estará situada bajo las olas frente a la costa de Curaçao.
La visión de Fabien Cousteau sobre cómo los humanos pueden vivir y trabajar en el océano a largo plazo se centra en los hábitats submarinos.
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Pero en lugar de las burbujas selladas y submarinas que podrían venir inmediatamente a la mente, esto no se parece a nada que haya visto antes.
Las construcciones están diseñadas para que parezcan y se sientan como casas en tierra.
Estos acogedores espacios cuentan con cocina, zona de trabajo y dormitorios.
Además, tienen ventanas al impresionante mundo submarino del exterior.
La "puerta de entrada" es una piscina lunar.
Se asentará en la parte inferior de la casa para facilitar el acceso dentro y fuera.
"Es muy diferente de un submarino. Un submarino es una burbuja. Proteus y la estación de aguas más profundas no serán técnicamente recipientes a presión", afirma Cousteau.
"La presión ambiente en el interior será la misma que en el exterior. Un recipiente a presión es cuando tienes un diferencial de presión en el interior frente al exterior".
Lo compara con coger un vaso al revés y empujarlo hacia el agua.
En lugar de que el agua llene la taza, se forma una burbuja de aire interior.
Esto se debe a que las presiones dentro y fuera del recipiente están equilibradas.
Esto sería útil para los habitantes de Proteus que practican submarinismo.
Se elimina la necesidad de ajustarse a las distintas presiones interiores y exteriores.
Se considera el análogo marino de la Estación Espacial Internacional.
Pero en lugar de astronautas, albergaría acuanautas.
De hecho, gran parte de la tecnología de Proteus es similar a la tecnología espacial.
Y hay mucho que investigar bajo las olas con esta antigua "pirámide" submarina recién descubierta.
La primera unidad frente a Curaçao se ubicará en una zona marina protegida a unos 18,3 m por debajo del nivel del mar.
"Un laboratorio submarino nos permite permanecer bajo el agua durante largos periodos de tiempo", afirma Cousteau.
Un submarinista normal que desciende a una profundidad de 18 metros sólo puede permanecer bajo el agua durante una hora aproximadamente debido a los rápidos cambios de presión.
La "estación espacial submarina" permite a los investigadores recoger datos todo el día, todos los días.
Este hombre que vivió 100 días bajo el agua tuvo una transformación de 'fallo vital'.
Es similar a los cambios a los que se enfrentan los astronautas que regresan a la Tierra convertidos en "personas diferentes".
Proteus Ocean Group es una empresa privada que explotaría y gestionaría el yacimiento.
Se están buscando más emplazamientos para la red Proteus en las aguas que rodean Europa y Estados Unidos.
El fondo marino se ha cartografiado en 3D para facilitar la construcción.
Si todo va según lo previsto, junto con una estación satélite conectada en aguas más profundas, se espera que Proteus esté instalada bajo el agua a finales de 2025.
Junto a la "estación espacial submarina" habrá un puesto terrestre de control de la misión.
Forbes cifra el precio de construcción de la "estación espacial submarina" en 135 millones de dólares.
Aunque suene revolucionario, el famoso abuelo de Cousteau fue en realidad uno de los primeros en ser pionero en la construcción de viviendas subacuáticas en los años sesenta.
Según el Museo de Historia del Buceo, a lo largo de la historia se han construido más de 60 hábitats en el fondo marino.
La mayoría han quedado abandonadas.
Aparte de las oportunidades de investigación, se cree que hay una oportunidad para el turismo submarino que es "más asequible" que los viajes espaciales.
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