Se calcula que, al menos, cincuenta submarinos del periodo de la Alemania nazi están perdidos, ilocalizados, aunque uno de ellos “acaba” de ser descubierto en las costas de la ciudad bonaerense de Necochea, a cuatro kilómetros de las playas Costa Bonita y Arenas Verdes, en la República Argentina. Bueno, en realidad fue descubierto en 2021 pero ahora, por fin, se ha confirmado que se trata de un sumergible de la Armada alemana que arribó a las costas sudamericanas en 1945, antes del final de la guerra.
La llegada de submarinos nazis a la Argentina no es un mito. Algunos oficiales, a quienes el final de la guerra les llegó en medio del océano, decidieron evadir las prisiones aliadas desembarcando en Sudamérica.
El 10 de julio de 1945 y el 17 de agosto de ese mismo año se rindieron en el puerto de Mar del Plata los submarinos U-530 y U-977 respectivamente, pero si damos crédito a los testimonios locales, hubo muchos más submarinos que, en lugar de entregarse, desembarcaron a su tripulación de manera clandestina y hundieron las naves a pocos kilómetros de la costa. Podría ser el caso del submarino hallado en Necochea.
Las primeras pistas para la localización del pecio las facilitó un lector de los libros de nuestro colaborador Abel Basti, un periodista que se ha dedicado a reconstruir la historia de los nazis arribados a Argentina. A partir de los relatos de su abuelo que le habló al joven de un desembarco nazi en el sector de las playas de Costa Bonita y Arenas Verdes, cerca de Quequén, Basti, al frente del grupo de investigación llamado Eslabón Perdido, rastrearon la zona gracias a una docena de buzos y la ayuda de un Vehículo operado en forma remota (ROV). A 30 metros de profundidad, descubrieron los restos del navío hundido, cuyas imágenes te mostramos a continuación.
Un naufragio no registrado
El Eslabón perdido, comprobó que el naufragio no había sido registrado nunca en las cartas náuticas de la zona y, en marzo de 2022, dieron parte a la Prefectura Naval Argentina que, tres meses más tarde, empezó a trabajar en el informe técnico del hallazgo. Los restos “se corresponden con un submarino alemán”, más exactamente, con los sumergibles denominados U-Boot, que Adolf Hitler utilizó durante la Segunda Guerra Mundial y que, según Basti, se habrían utilizado también para la huida de algunos jerarcas nazis de Alemania.
Para confirmarlo, en octubre del año pasado, la Prefectura Naval puso en marcha una segunda expedición a las coordenadas geográficas, 38º 35,859′ de latitud Sur y Longitud 058º 35,829, para realizar peritajes con mayor grado de detalle.
Lamentablemente, las malas condiciones de la zona en que se encuentra hundido el pecio, con mucho material flotante a causa del oleaje y el deterioro propio del navío, enterrado en gran parte en el fondo del océano, dificultó la identificación… hasta ahora.
Hay elementos, como el periscopio que confirman que se trata de un U-Boot alemán
Gracias al perito italiano Fabio Bisciotti, experto en buques de la Segunda Guerra Mundial que trabaja para el Pentágono rescatando navíos de esa época en el Mediterráneo, confirmó que elementos como el periscopio, parte de la torreta o la escotilla no dejan lugar a dudas que se trata de un U-Boot alemán. A finales de 2022, Eslabón perdido hallaba precisamente la parte de la chapa identificatoria de la escotilla en la que son visibles dos números impresos de color negro y que confirman inequívocamente que estamos ante un submarino de la Kriegsmarine
Bisciotti confirmó, asimismo, que el casco del sumergible presentaba signos de haber sido deliberadamente explotado, posiblemente con la finalidad de borrar evidencias.
En julio de 1945, un cable secreto de la Embajada estadounidense en Buenos Aires informó a Washington acerca de la “llegada de submarinos alemanes a las costas de Argentina.” El cable, que reproduce Basti en un tweet, asegura que “circulan varios rumores en Buenos Aires referidos a la llegada del submarino U-530 antes de su rendición.” Y añade que, “una fuente de credibilidad desconocida, asegura que el 28 de junio un submarino emergió en Puerto San Julián, territorio de la provincia de Santa Cruz, del que descendieron dos personas sin identificar, uno sería un alto oficial y un civil aún más importante”.
El cable añade que se recibió otro informe de “fuente de fiabilidad desconocida” que aseguró que Hitler desembarcó el 20 de junio de 1945 y, acompañado por el mayor del ejército argentino, León Bengoa Llamas, se dirigieron a un escondite secreto en Chaco. ¿No había muerto Hitler en el bunker?
No hay comentarios:
Publicar un comentario