29 diciembre 2018

UN PROYECTO DE SUBMARINO QUE PUDO CAMBIAR LA HISTORIA

Comentarios

CAUSTICO
Pues para ser republicano, de lo leido arriba deduzco que poquitos escrúpulos tenía el hombre.
Silber
Una buena película para hacerse una idea de la vida en un submarino alemán en la II G. M. es "Das Boot. El submarino" de Wolfgang Petersen. Se la recomiendo.
Señor Negro
Hasta 1945 los mejores submarinos fueron los alemanes, de eso no hay ninguna duda. De hecho dicen que lo único que dio pesadillas reales a Churchill durante la guerra fueron los uboots. Churchill sabía que para Gran Bretaña las comunicaciones marítimas eran vitales y que te saliera por sorpresa un submarino y te hundiera tus barcos era terrible.
Suscribo lo dicho por Silber: la peli de Petersen es buenísima.
Lothar von Arnauld de la Perière es el máximo as de los submarinos alemanes durante la 1a Guerra Mundial. Hundió más barcos que cualquier otro capitán de submarino y ni siquiera fue superado durante la 2a Guerra Mundial. Aunque hay que decir que la mayoría de los barcos los hundió a superficie con el cañón del U-Boot (en esta época los torpedos eran de muy mala calidad y costaba mucho apuntarlos). Otro gran as de los submarinos alemanes de la 1a Guerra Mundial fue el famoso Otto Weddigen. Weddigen impresionó al mundo cuando en septiembre de 1914 al mando del pequeño U-9 hundió en pocas horas a 3 cruceros auxiliares de la Royal Navy. Los británicos no entendían lo que estaba pasando y solo hacia el final de la batalla entendieron que podía haber un submarino cerca. Hasta entonces pensaban que sus barcos estaban chocando con minas. Fue un golpe psicológico muy duro para ellos y les hizo entender que sus enormes barcos de superficie iban a ser muy vulnerables a los torpedos de los submarinos alemanes. Ésta era la gracia de los submarinos: con una pequeña nave de 50 hombres de tripulación podías hundir un acorazado de 2000 hombres de tripulación. El almirante Dönitz lo entendió perfectamente y en los años 30 urgió a Hitler a construir una gran flota de submarinos. Pero Hitler dudó e invirtió mucho dinero en una flota de superficie que nunca jugó un papel importante. El acorazado Bismarck fue rápidamente hundido por los británicos en 1941 y el Tirpitz quedó prisionero en un fiordo de Noruega hasta que lo hundieron aviones ingleses. Alemania ni siquiera llegó a botar un portaaviones. Para cuando Hitler se decidió finalmente a poner todos los esfuerzos en los submarinos, a principios de 1943, ya era demasiado tarde. Los radares aliados habían mejorado mucho y los ingleses estaban descodificando a Enigma gracias al proyecto Ultra.
Para suerte de todos los europeos Hitler se equivocó tanto en el mar como en tierra.
Señor Negro
La flota que hizo el papel más triste de la 2a Guerra Mundial fue la flota italiana. Mussolini tenía una flota bastante grande en 1940 y los franceses la temían mucho pero rápidamente se vio que tecnológicamente estaba muy atrasada. Además prácticamente desde el inicio de la guerra los ingleses consiguieron descifrar las comunicaciones italianas. El resultado fue que los italianos fueron de derrota en derrota y la Royal Navy se paseó por el Mediterráneo sin problemas. En 1940 los ingleses atacaron Tarento con impunidad (aquel ataque inspiró a los japoneses a hacer lo mismo en Pearl Harbor) y en 1941 los ingleses hundieron a 3 cruceros italianos en la batalla del Cabo Matapán. La clave de esta batalla fueron los radares ingleses y el descifrado de las comunicaciones por radio italianas. Por su parte los submarinos italianos hicieron el ridículo y más submarinos italianos fueron hundidos que barcos mercantes hundieron estos submarinos. Su único éxito fue enviar a los maiale (pequeñas embarcaciones de hombres rana) al puerto de Alejandría para colocar minas en acorazados ingleses.
En 1943 la flota italiana volvió a ser humillada pero esta vez por los alemanes. Cuando Italia firmó el armisticio con los aliados sus buques salparon hacia puertos africanos. Los alemanes ya estaban alerta y enviaron a aviones a interceptar a la flota italiana. Estos aviones estaban equipados con unas nuevas bombas guiadas por radio y el resultado fue que el acorazado Roma fue hundido y unos 1200 marinos italianos se ahogaron.
Se puede decir tranquilamente que a lo largo de toda la 2a Guerra Mundial las fuerzas armadas de Mussolini fracasaron en todas las campañas.


No hay comentarios:

Publicar un comentario