Para 2018 las fuerzas nucleares estratégicas contarán con ocho submarinos del proyecto Borei. Cuatro engrosarán las filas de la Flota del Norte y otros cuatro destinados a la Flota del Pacífico. De este modo el potencial de disuasión nuclear de Rusia que hoy se encuentra a un alto nivel, aumentará considerablemente. Y cualquier adversario potencial puede estar seguro de que, en caso de agredir a Rusia, en respuesta recibirá un golpe nuclear demoledor. No tendrá que ser necesariamente desde el mar, también podrá ser desde la tierra,–señala Víktor Litovkin, redactor de la Revista Militar Independiente:
–La disuasión nuclear funciona y nadie se atreve a atacar a Rusia incluyendo EEUU y la OTAN. El incremento de las fuerzas nucleares navales en la Armada rusa contribuirá, sin duda, a fortalecer el sistema de disuasión nuclear. Y máxime que cada uno de los primeros dos submarinos de la clase Borei llevará dieciséis misiles “Bulava” dotados de entre seis y diez ojivas cada uno. Los demás sumergibles, entre ellos el “Vladimir Monomaj”, portarán, cada uno, veinte misiles de este tipo. Pero no hay que perder de vista que estos misiles y ojivas junto con los lanzados desde tierra y desde aire, deberán ajustarse a lo pactado en el Tratado START III.
Según este documento, tanto Rusia como EEUU pueden tener setecientos portadores y otros cien misiles almacenados, y contar con 1550 ojivas nucleares. En el umbral del año 2020 las fuerzas nucleares estratégicas navales en el norte de Rusia dispondrán de once submarinos nucleares estratégicos en la mayor agrupación de la historia. En caso de ser desplegada en tierra y en mar el escudo de defensa antimisil estadounidense, difícilmente podrá contener a estos submarinos, opina Víktor Litovkin:
–El Océano Glacial es el área más beneficiosa para Rusia porque encontrar y descubrir nuestros submarinos estratégicos bajo la coraza de hielo es mucho más difícil que en cualquier otro sitio. Dudo mucho de que el sistema de defensa antimisil pueda detectarlos. Nuestros diseñadores de misiles afirman que no existe un sistema de defensa antimisil que pueda servir de escudo frente a nuestros misiles estratégicos y cabezas nucleares capaces de desarrollar velocidades hipersónicas y seguir trayectorias impredecibles.
El incremento de submarinos nucleares sofisticados dotados de misiles balísticos intercontinentales, en guardia en las profundidades del océano, es un factor de preocupación para adversarios potenciales, ya sean EEUU, Inglaterra o Francia, asevera Viktor Baranets, observador militar del diario Komsomolskaya Pravda:
–La defensa antimisil está destinada en primer término a abatir misiles balísticos desplegados en tierra, tanto en silos como en plataformas móviles. En la medida que se refuerce la defensa antimisil estadounidense en Europa, en este terreno vamos a enfrentar graves problemas.
Ahora se retiran unos tipos de misiles y aparecen otros, señala el experto. Estos artefactos nuevos desarrollan buena velocidad y poseen propiedades únicas como la maniobrabilidad en lo que a la altura y el rumbo se refiere. El Gobierno asignó cerca de setecientos mil millones de dólares para el desarrollo del ejército ruso hasta el año 2020. Parte considerable de este presupuesto se destinará a las tropas de misiles estratégicos y a las fuerzas nucleares estratégicas.
http://spanish.ruvr.ru/radio_broadcast/23016114/64735511.html
http://www.gizmag.com/nanotube-sheets-for-stealthy-submarines/16231/
ResponderEliminarnovedades para los chinos