Rusia manifestó que comenzó el desarrollo de submarinos de quinta generación, tanto atómicos como diesel. El comandante en jefe de la Armada de Rusia, Víctor Chirkov, afirmó anteriormente que la fabricación en serie de los submarinos de quinta generación comenzará después del 2030.
En la actualidad, la flota submarina de Rusia está principalmente conformada por buques de tercera generación. El primer sumergible de cuarta generación, “Yuri Dolgoruki”, del proyecto 955 Borei, fue incorporado a la Armada en enero de 2013.
En total, se planea construir de 8 a 10 submarinos del proyecto Borei, que remplazarán los del proyecto 677BDRM Delfin, de tercera generación, y constituirán el núcleo de las fuerzas navales nucleares de Rusia después del 2018.
Los submarinos de cuarta generación de las clases Borei, Yasen y Lada, desarrollados por las oficinas de diseño Rubín y Malajit en San Petersburgo, constituirán el núcleo de la flota submarina de Rusia durante los próximos 15 o 20 años.
En cuanto a los planes a largo plazo (hasta 2050) se prevé iniciar la fabricación de las llamadas plataformas universales, que se completarán con módulos homologados de equipo y armamento para los submarinos y buques de superficie.
A día de hoy el núcleo de las fuerzas navales estratégicas de Rusia lo constituyen los sumergibles de tercera generación de los proyectos 667 Delfín y Kalmar, Delta-IV y III respectivamente, según la clasificación de la OTAN. Seis submarinos del proyecto Delfin cumplen misiones en la Flota rusa del Norte y cuatro submarinos Kalmar, en la Flota rusa del Pacífico.
Los sumergibles del proyecto 885 Yasen sustituirán los submarinos nucleares polivalentes de varios proyectos (945, 949, 971, etc). El buque insignia de esta clase ‘Severodvinsk’ será incorporado a la Armada rusa en 2013 también. Además, la Marina de Guerra rusa planea reemplazar los submarinos diésel de los proyectos 877 y 636 por los sumergibles diesel-eléctricos del proyecto 677 Lada. En 2010, el primer submarino de este tipo, el ‘San Petersburgo’, fue entregado a la Armada rusa para pasar pruebas de navegación, pero hasta hoy en día no se ha incorporado a sus arsenales.
Se planea dotar a los submarinos de la clase Lada con una planta propulsora no dependiente del aire. Dos oficinas de diseño rusos, Rubín y Malajit, están desarrollando en San Petersburgo los nuevos proyectos de submarinos.
Nacho Padró
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