En 1975, un grupo de marinos ecuatorianos estaba en Alemania colaborando en la construcción de los submarinos Shyri y Huancavilca. El entonces sargento Jorge Echeverría Murgueytio integraba la nómina y su familia lo acompañaba en Europa, ya que la misión duraba meses. Su hijo Jorge tenía 5 años y, por supuesto, sabía que su papá era submarinista. Así que a la típica pregunta en el aula de clases, al término del año lectivo, su respuesta fue: submarinista como mi papá.
Echeverría padre, de 75 años y suboficial retirado, rememoró el episodio luego de filmar ayer con su teléfono el momento en que su hijo, el capitán de fragata Jorge Echeverría Buchelli asumía la comandancia del submarino Huancavilca, que él ayudó a construir hace 43 años.
“En papá vio el espejo; él me veía trabajando en el submarino, ahí le entró la chispa”, dijo orgulloso, una vez que terminó de filmar lo que llamó “momentos que no se repetirán”.
Por captar escenas y movido por la emoción, Echeverría padre estuvo parado durante casi toda la ceremonia que se efectuó en la Base Naval Sur (duró una hora), donde el también capitán de fragata Carlos Guzmán Mata asumió la comandancia del submarino Shyri, el primero que Alemania finalizó de construir para la Armada patria, el 5 de noviembre de 1977.
Entonces, por primera vez, una bandera ecuatoriana se izaba en un submarino, reseñó en el acto el capitán de navío Guillermo Donoso, a cargo del Comando de Submarinos.
De su trayectoria como submarinista, Echeverría padre dijo que se caracterizaba por “ser cuadrado”, en referencia a la disciplina, a la exigencia para con él y sus subalternos. “Me enseñaron la doctrina alemana, que dice que hasta dormidos se sueña con la disciplina”, comenta el ya adulto mayor, partícipe de los patrullajes en el conflicto de Paquisha, en 1981.
Los submarinos son llamados tiburones de acero, o tildados como la más grande amenaza en el mar por ser invisibles y difusos. Así fue remarcado en el acto de relevo de comandantes, o más bien, de conmemoración del aniversario del Comando de Submarinos, alusivo al 8 de marzo de 1978 cuando el Shyri llegó a Guayaquil. (I)
Minuto de silencio
Durante su discurso, el capitán de navío Guillermo Donoso, comandante del Comando de Submarinos, pidió participar de un minuto de silencio en respeto a los 44 submarinistas argentinos desaparecidos, mientras ejecutaban maniobras a bordo del submarino ARA San Juan, en noviembre del 2017. Recordó que la Armada del Ecuador colaboró en las labores de búsqueda con un avión de exploración aeromarí-tima y una cámara hiperbárica portátil. Reflexionó sobre el riesgo de la profesión naval.
Los submarinos Shyri (i) y Huancavilca fueron construidos en Alemania. El primero llegó al país el 8 de marzo de 1978 y ello marcó la fecha de conmemoración del Comando de Submarinos. Ronny Zambrano
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