El Laboratorio de Vehículos Submarinos de la Universidad
Politécnica de Cartagena ya ha comenzado a probar su nuevo equipo, un vehículo
autónomo sumergible de tipo Ecomapper, capaz de navegar durante ocho horas a
una velocidad de crucero de 4 nudos y a una profundidad máxima de 100 metros según la ruta
que se le programe. Esta nueva tecnología estará ubicada en el edificio del
CEDIT (Centro de Desarrollo e Innovación Tecnológica) del Parque Tecnológico de
Fuente Alamo, según han informado fuentes de la institución docente.
El vehículo, de reducidas dimensiones y que puede ser
introducido en el agua por una única persona, ofrece un sinfín de utilidades a
investigadores y empresas, desde medir las características del agua y detectar
vertidos a realizar planos de los fondos marinos o fluviales, y todo a ello a
distancia. "Puedes estar en el despacho mientras el vehículo navega",
explica Javier Gilabert, responsable junto a Antonio Guerrero del Laboratorio
de Vehículos Submarinos de la UPCT (www.upct.es/lvs).
Una vez familiarizados con el vehículo, los responsables del
Laboratorio iniciarán una primera fase de pruebas en piscina, entrenando sus
movimientos, que pueden controlarse hasta con un móvil, para después testarlo
en las tranquilas y poco profundas aguas del Mar Menor. Superada esta fase,
estará preparado para recorrer, por ejemplo, los fondos del Puerto de Cartagena
o de la bahía de Escombreras.
El objetivo de la adquisición de la UPCT, el tercer vehículo
de estas características que existe en España (los otros dos acompañan al buque
Hespérides de investigación oceánica de la Armada), es trasladar sus
aplicaciones y operatividad a los futuros equipos propios que pretenden
construir los científicos de la UPCT, que ya remodelaron por completo un
vehículo submarino cedido por Defensa.
El vehículo Ecomapper ofrece una altísima precisión de
navegación y posicionamiento gracias a la antena GPS con la que cuenta, que
utiliza cuando navega en superficie, y a un sensor que mediante ultrasonidos le
permite calcular la distancia al fondo. Además, está equipado para medir la
velocidad de las corrientes, la temperatura del agua, su salinidad y turbidez,
los niveles de clorofila, oxígeno y así hasta 18 parámetros. Todos estos datos
quedan registrados y pueden ser transmitidos por wi-fi o vía satélite gracias
al equipamiento del vehículo.
Entre las funciones que puede desempeñar el vehículo destaca
la detección y delimitación de vertidos, el calibrado de modelos de corrientes,
la localización de lugares óptimos de pesca por la confluencia de frentes de
agua de distinta temperatura y la realización de batimetrías de los fondos para
el dragado de canales o puertos.
En todas estas labores el vehículo no tiene gastos de
tripulación o combustible (funciona con baterías recargables) y permite tomar
datos en continuo frente a los actuales sondeos con barcos, por lo que resulta
ideal para la caracterización de masas de agua. El vehículo cuenta con varias
medidas de seguridad para evitar su extravío, tales como un sistema de emisión
de ultrasonidos y un airbag que lo emerge hasta la superficie, según las mismas
fuentes.
El Parque Tecnológico de Fuente Alamo está considerado como
un enclave estratégico en la Región de Murcia donde las instituciones y
compañías ubicadas comparten una decidida apuesta por la innovación, el
desarrollo y la tecnología. Actualmente presta servicio a 23 empresas que están
ubicadas en él. Es una iniciativa del Gobierno regional, guiada por la
Consejería de Empresa, Universidades e Investigación y el Instituto de Fomento
(INFO), enmarcada bajo las líneas de desarrollo del Plan de Ciencia y
Tecnología.
http://www.laverdad.es
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